NO LO DEJÓ IR

Tercera fecha del campeonato. Después de su primera victoria en la fecha pasada, Pittaluga quería sostener el rendimiento y mantenerse en la senda ganadora. Enfrente lo esperaba NN FC, que llegaba con un triunfo y una derrota.

Con Pitrelli lesionado y aún sin debutar, en esta ocasión el Violeta no pudo contar con un reemplazo, por lo tanto jugaron los seis ya habituales.

El partido comenzó con el equipo dormido y el rival lo aprovechó en la primera que tuvo para ponerse 1-0 de movida. NN mostró rápidamente su estrategia en el encuentro: salida con pelota larga a su número 10 para pivotear y generar desde allí las situaciones de gol. Pitta, luego del gol recibido, comenzó con el suyo: salida desde abajo con toque y luego asociando o desequilibrando desde la velocidad de Orellana y Camblor. Una vez ajustado el juego y la marca se empezó a marcar la superioridad en cancha y no tardaría en volcarse al resultado. Un buen lateral de Orellana encontraría al Matador Aguilera de cara al arco para que meta su tradicional uñazo y empate el partido. El rival iba cargándose de faltas y sería en una de ellas que llegaría el desnivel: con un zurdazo por afuera de la barrera Camblor lograba vencer al arquero y poner el 2-1, acomodando así el resultado al desarrollo del partido. El primer tiempo se cerró de la mejor manera, cuando luego de una gran jugada colectiva Camblor la empujó al arco vacío para irse 3-1 al descanso. Solo quedó tiempo para un Tiro Castigo a favor de Pitta que Orellana no pudo convertir.

En el arranque del complemento todo se transformó. Pitta no agarraba la pelota, marcaba mal y el rival a través de su número 10 estaba enchufadísimo. Así, en un abrir y cerrar de ojos el 3-1 pasó a ser 3-4. El Violeta no podía salir de su confusión y el partido que parecía encaminado se había vuelto incierto, hasta que apareció la jugada que volvió a encaminarlo: el Matador Aguilera, luego de recibir por izquierda y definir al cuerpo de un defensor, logró rematar en el rebote y con una extraña parábola la pelota terminó adentro del arco. Luego del empate, Pitta volvió a hacer pie en la cancha y mostrar sus virtudes tanto en defensa como en ataque, de la batuta de Orellana que se encontraba con el arco para meter un doblete con dos grandes definiciones y poner las cosas 6-4. La superioridad se volvía a mostrar pero faltaban goles para liquidarlo y el rival empezaba a empujar buscando el empate, con un Violeta cargado de faltas. En otra buena maniobra del 10 iban a encontrar el descuento y poco después iban a encontrar una oportunidad inmejorable para empatar. Luego de un error de Camblor que terminó cometiendo la sexta falta, NN tuvo con un Tiro Castigo. Afortunadamente, el 10 estrelló su remate en el palo y Pitta volvió a respirar. Los riesgos tomados por el rival empezaron a ser mayores y el Violeta terminó aprovechándolo. Camblor tomó la pelota luego de un robo al arquero volcado en ataque y se fue hasta el arco rival para estirar la ventaja a 7-5. El rival se encontró con un sexto gol que le dio expectativas pero rápidamente otro contraataque terminaría definido con un fierrazo de Orellana para poner el 8-6 definitivo.
Buena victoria de Pitta. No solo por como jugó durante varios pasajes del partido, sino por como pudo recuperarse luego de un comienzo de pesadilla en el segundo tiempo. Por supuesto que es importante evitar esas siestas, esos baches que pueden costar un partido. Pero mucho más valioso es tener el carácter para poder dejar rápidamente atrás esos momentos y volver a dominar el partido. Los equipos necesitan no solo tener la virtud de rendir cuando las cosas van bien sino también la capacidad de resolver cuando nada parece salir.


Uno x uno:

Aleidín: En las siestas que tuvo el equipo el Capitán no pudo ser solución pero cuando el equipo levantó, lo sostuvo con un par de tapadas difíciles.

Acebey: Con distracciones en los momentos de desconcierto general, luego se afirmó y rindió con solvencia en el fondo, salvo por un blooper en una confusión arbitral.

Otero: El Demente estuvo perdido en el inicio del complemento pero antes y después raspó como sabe. Buena combinación con Camblor en el 3-1.

Aguilera: Al entrar se ocupó de intentar neutralizar al 10 rival y lo hizo con más éxito que fracaso. En ataque marcó sus dos primeros goles en Pittaluga, ambos en momentos clave para empatar el marcador.

Orellana: Otra gran actuación del salteño, manejando los hilos del equipo y marcando tres goles para ser la figura oficial del encuentro. Sufrió como todos el bajón del inicio del ST.

Camblor: Más encarador que pasador, cargó de faltas al rival y marcó tres goles. También partícipe de ese inicio fatal del complemento y un error que podría haber costado un empate.

El próximo Sábado a las 21.30, Pitta intentará extender la racha positiva cuando enfrente a La Caprichosa, rival que viene invicto y logró un empate ante Almagro, equipo que había paseado haciendo 12 goles en sus dos primeras presentaciones. Por lo tanto, todo parece indicar que será un partido exigente para demostrar en dónde está parado el Violeta.

LE TIRÓ LA CAMISETA

La segunda fecha del campeonato esperaba al Violeta con nuevos e importantes sucesos: la nueva camiseta y el regreso del histórico Demente Doctor Otero. La camiseta significaba poder volver a jugar vistiendo de violeta, fundamental para la mística de Pitta, y llevando ahora en su pecho la imagen de su Líder. El regreso de Otero, por su parte, permitía poder jugar por primera vez con el trío asesino del fondo completo. Tras la caída de la primera fecha, se esperaba que esto fuera un impulso más para poder conseguir los primeros tres puntos del campeonato. Enfrente esperaba Balvanera FC, quien venía de perder por amplia diferencia en su debut.

La noche lluviosa asomaba complicada para el desarrollo del partido, con una de las lineas de fondo con mucha humedad. Luego de idas y vueltas acerca del partido, si se jugaba, no se jugaba, se pasaba de cancha, finalmente se decidió jugar en la misma cancha luego de una intervención para intentar secar lo más posible la línea de fondo en cuestión y reducir al mínimo el riesgo de accidentes.

Pitta contaba nuevamente con una baja de última hora, tras conocerse una lesión de Pitrelli. Sin embargo, esto posibilitó el regreso de una vieja gloria internacional del Violeta: Fernando Da Costa.

El comienzo del partido fue una vez más con cautela, esperando ver qué proponía el rival e intentando salir rápidamente de contra. Balvanera se complicaba al intentar saliendo por abajo y terminaba eligiendo la jugada individual o la pelota larga a espaldas de la defensa del Violeta. Esas complicaciones, bien aprovechadas por Pitta, derivaron en la apertura del marcador que esta vez no se hizo desear: Camblor tomó un pase que quedó a mitad de camino y con un zurdazo entre las piernas del arquero puso el 1-0. El partido siguió trabado, con Pittaluga bien plantado abajo ante un rival con pocas ideas en ataque. Sin embargo, una distracción en un largo pelotazo de área a área terminó con un cabezazo adentro del arco del Capitán Aleidín y otra vez el partido volvía a estar en tablas. Al Violeta le costaba generar juego pero tenía en la velocidad de sus delanteros la llave de los goles. Primero una enorme jugada de Orellana limpiando rivales y definiendo con un potente remate iba a poner a Pitta 2-1. Y poco después sería Camblor, tras recibir un lateral rápido, quien limpiaría a un defensor rival para definir cruzado y poner el 3-1. Los ingresos de Da Costa y el Matador Aguilera le dieron una pausa y un toque más al equipo, que empezó a tener mejor la pelota pero sin poder traducirlo en goles. Por otro lado, el entusiasmo y esfuerzo defensivo se traducía en una carga de faltas que terminaría con Tiros Castigo en contra, el único camino que pudo encontrar el rival en ese final de la primera etapa para vulnerar al Violeta. Tras fallar el primero por mucho, el 9 rival se desquitó en el segundo con un gran remate para dejar las cosas 3-2 y dejar el resultado muy cortito para la segunda mitad.

El complemento arrancaría muy positivo para el Violeta. Con la dupla Camblor - Da Costa en cancha aumentaron las situaciones de gol y esta vez, al contrario de lo sucedido la semana pasada, se supo aprovechar el momento para sacar distancia. Dos intervenciones de Camblor, primero con un remate lejano ayudado por un desvío en el camino y luego con una definición con ángulo cerrado, pondrían las cosas 5-2. Con el correr de los minutos Pitta fue retrasándose y jugando con la ventaja, esperando acertar algunas contras para liquidar el encuentro. Y si bien le ponía complicadas las cosas al rival para encontrar situaciones claras, no podía sacar provecho de los contraataques, por lo cual el partido no terminaba de definirse. Menos aún cuando Balvanera pudo encontrar un descuento luego de mucho intentarlo para achicar la diferencia a un 5-3. El trámite del partido no cambiaba y ya con Orellana en cancha Pitta redoblaba sus intentos por estirar la diferencia y sentenciar la historia pero el arco nuevamente parecía cerrado: la mala puntería, pases errados y algunas intervenciones del arquero hicieron posible que el partido siguiera ahí, cortito, a tiro del empate. Parecía que, como ha marcado siempre la historia, la victoria no iba a poder ser sin sufrir. A poco del final, un gol más del rival con un remate lejano que pasó entre mil piernas acrecentó los nervios de Pitta y el entusiasmo de Balvanera, pero el Demente Otero y el Matador Aguilera apretaron los dientes, el Capitán Aleidín bajó la persiana y el 5-4 se mantuvo hasta el final del encuentro.

Importantísimo conseguir el primer triunfo de esta nueva etapa pero también lo fue seguir afinando el funcionamiento del equipo, tanto a la hora de defender minimizando las jugadas en las que se quede mal parados como en ataque ajustando de a poco los movimientos en la salida y amigándose los delanteros con el arco de enfrente, punto que deberá seguir mejorando para no sufrir innecesariamente como sucedió esta vez. Otro aspecto positivo es el contagio de la mística pittaluguense que se va generando, siendo el entusiasmo y el esfuerzo de todos el motor principal del equipo. Aunque, claro está, deberá aprender a manejar esa energía para no pasarse de revoluciones en algunos pasajes del encuentro.

Uno por uno:

Aleidín: Otra buena actuación del Capitán. Se durmió junto con la defensa en el 1-1 pero después se mostró seguro y las veces que el rival lo exigió respondió con eficacia.

Acebey: Bien en defensa, con pie firme y su habitual entrega para anular los ataques por su sector. En ataque no pudo aportar gol pero volvió a estar cerca de convertir.

Otero: El Demente Doctor finalmente volvió a vestirse de Violeta y lo hizo como mejor sabe, repartiendo patadas a toda la delantera rival. Entregó algunos chispazos de su talento.

Aguilera: Su ingreso volvió a ser importante para ordenar un poco al equipo. Al igual que sus dos compañeros del fondo, metió siempre y perdió poco. Apurado en algunas contras para meter el pase entre lineas.

Orellana: Bien aguantando de espaldas para las salidas y mejor aún cuando quedaba de frente para el mano a mano. Gran gol en jugada personal.

Da Costa: En otro regreso histórico, el brasilero mostró su repertorio. Le dio toque al equipo, se excedió en algunos lujos y metió pierna fuerte hasta ser amonestado.

Camblor: Se desquitó luego del flojo debut convirtiendo cuatro goles y aportando buenas intervenciones en ataque. Amonestado pronto por una mano en ataque y posterior protesta.

La próxima fecha será luego del receso por Semana Santa, el Sábado 22 de Abril. Allí se enfrentará con NN FC, equipo que en la fecha anterior había ganado con autoridad por lo cual promete ser un partido intenso.

EL GOL NO VOLVIO

Volvió el Violeta. Reconstituidas las estructuras dirigenciales del Club en una emotiva reunión de Comisión hace ya dos meses, cuando asomaba el cumpleaños número once de la institución, solo restaba la conformación del plantel y el regreso a la competencia. A la base histórica conformada por Federico Acebey, Alexis Aleidín, Federico Otero y Ariel Camblor se le sumaron Damián Aguilera, Helohim Pitrelli y Andrés Orellana. Y la competencia elegida fue una vez más en Centenera, donde se escribieron las históricas páginas de la institución, aunque esta vez los sábados por la noche.

El debut ponía al Violeta frente a frente con El Trinche, en la cancha principal del Club del Pasaje. Como siempre supo marcar la historia, aparecieron las primeras adversidades en el camino: no iba a poder contar con Pitrelli ni el "Demente" Otero para este primer encuentro, motivo por el cual convocó a Andrés Bellagamba para ser parte de este momento histórico.

El rival presentaba como primera característica un plantel numeroso de unos 10 jugadores, lo cual significaba ante las ausencias del Violeta que el aire y físico iban a ser un factor importante en el desarrollo del partido.

El encuentro comenzó cerrado, con un Pittaluga esperando en mitad de cancha, esperando y estudiando lo que pudiera hacer el rival y saliendo rápidamente de contra a través de Orellana y Camblor. Así, tuvo rápidamente el Violeta sus primeras oportunidades pero no pudo encontrar la red. El rival buscaba llevar la pelota a su centrodelantero para aprovechar su físico y luego romper por los costados, junto con algunos arrestos individuales de sus defensores, y fue encontrando caminos hacia el arco del Capitán de Pitta, Aleidín, que empezó a mostrarse como un escollo difícil de superar. En este contexto de paridad, quien pudo romper el cero lamentablemente fue El Trinche, que pudo dejar un jugador mano a mano y no falló. El gol del rival no modificó el entusiasmo y el empuje del Violeta, que desde allí al final del período generó varias situaciones de gol pero una vez más se quedo con el grito atragantado. El rival apeló a las faltas para cortar ataques y llegó a la penalización, pero el Violeta no pudo forzar una sexta falta. Así, se iba el primer tiempo 1-0.

En el complemento, nuevamente comenzó mejor Pitta, el ingreso de Damián Aguilera para neutralizar al 9 rival dio sus frutos y el empate estuvo más cerca que nunca. Una vez más, el arco estuvo corrido, a punto tal de errar un gol con el arco casi vacío. El rival comenzaba a aprovechar su numeroso banco de suplentes con constantes rotaciones, cortando el ritmo del partido y teniendo siempre piernas más frescas para no sufrir el rato final del encuentro. En esa diferencia se fundamentó el desequilibrio en el final. Los cruces y la movilidad ya le costaban un poco más al Violeta y el rival fue acercándose con más peligro al arco de Aleidín, que apareció con algunas buenas tapadas para mantener el resultado a tiro hasta que finalmente en una jugada con varios rebotes, luego de otra tapada más, un rebote cayó en los pies del 9 y sentenció el 2-0. Pitta no se fue del partido, pero seguía sin poder cristalizar su rendimiento en el marcador, en este caso con una buena maniobra de Camblor que definió alto y una buena entrada de Acebey por el medio que el arquero pudo contener. Así las cosas, con las piernas más cansadas para el retroceso, más volcado al atque y sin poder convertir, en los minutos finales se amplió la diferencia hasta el 0-4. En el ocaso del partido, habría tiempo para romper el maleficio y además establecer el primer hito de la nueva era: Acebey, en otro ingreso por el medio, pudo finalmente encontrar la red y convertirse en el autor del primer gol de esta etapa del Violeta, estampando el 1-4 definitivo.

La lectura del partido es positiva a pesar de la bronca de la derrota. Un equipo nuevo con bajas de último minuto y sin rodaje estuvo a la altura del partido y de un rival organizado. De no haber sido por la mala noche de cara al arco (los delanteros no convirtieron), sobre todo por los goles fallados en momentos clave del partido (el 0-0 y 1-0) el equipo podría haberse llevado tranquilamente un resultado mejor, algo que deberá demostrar en la segunda rueda del torneo cuando vuelva a enfrentar a este rival. Y por supuesto, lo mejor de todo fue haber concretado el regreso y poder volver a disfrutar de estos partidos.

Uno por uno:

Aleidín: Muy buen regreso del ahora Capitán del Violeta. Salvo un par de distracciones, respondió muy bien cuando lo exigieron, por ejemplo con una gran triple atajada en el ST.

Acebey: La clásica entrega del histórico defensor, también con varias intervenciones en ataque. El arquero le sacó un par y finalmente pudo marcar el gol, el primero de la nueva era.

Bellagamba: Llamado sobre la hora, otro buen esfuerzo en defensa y con la pelota lanzando buenos pases y generando algunas faltas.

Aguilera: Entró en el ST y pudo neutralizar casi permanentemente al 9 rival, además de aportarle orden al equipo a la hora de pararse defensivamente. Buen estreno.

Orellana: La manija futbolística del equipo. Siempre difícil de tomar para la defensa rival, jugando y haciendo jugar. Solo le faltó el gol para que sea un estreno ideal.

Camblor: Por momentos Inquietó a la defensa con sus piques, por otros le costó meterse en el juego. También muy falto de puntería.

La próxima fecha será ante Balvanera, a las 20.30. Con el regreso del histórico Pepe Otero y el estreno de la nueva indumentaria, se espera otra linda jornada, quizás esta vez con final feliz.