domingo, mayo 13, 2007

EQUIPO DE UN TIEMPO

Hay un factor común entre todas estas derrotas, el cual, partido tras partido, se va descubriendo. Tras la derrota de hoy por 9-5 frente a Los Gurises, quedó bastante demostrado cual es este factor. Otra vez el equipo jugó un solo tiempo. O se podría decir un tiempo y monedas, ya que el inicio del partido fue favorable al Violeta. Un Violeta desarmado, sin Paradela (lesionado) y los hermanos Ferrentino (ausentes con aviso), que salió con Rabachini en el arco y Alvarez reemplazando a German Ferrentino. Justamente Alvarez contó con dos mano a mano claros que termino desperdiciando y entonces llegó la caída. Un gol desde lejos del rival puso un 1-0 que no solo significó una desventaja, sino también una caída anímica de los delanteros en especial (Camblor apagadísimo y protestón) y también en la defensa, que trataba de ordenar pero no podía. Entonces entraron uno, dos, tres... seis goles, y Pitta se fue golpeado al descanso. Rabachini se sacó el buzo y fue arriba, Aleidín ocupó el arco y entonces el team se acomodó. Y no solo eso, afloraron el coraje y los huevos dignos de un campeón. El Violeta comenzó a atacar, de la mano de un Camblor mucho mas inspirado que formaba buena dupla con Rabachini, de los potentes remates de Acebey, y del aguante de Otero en defensa (amonestado, casi lo echan por cometer tres manos). Marcó el 1-6 Acebey justamente, con un potente tiro a distancia, y el 2-6 Camblor. El rival llega al séptimo gol, pero Pitta no baja los brazos y va. Y consigue el 3-7 otra vez con Camblor, en una jugada rara. Los Gurises (de gran entrega y corazón, y además de muy buenos valores humanos) ponen el 3-8 y con un penal que el arquero le comete a Camblor infantilmente Pitta se pone 4-8 (bien pateado por Acebey). Rabachini pone el 5-8 y el Violeta erra goles increíbles. Entonces, el noveno gol rival sella el 9-5 definitivo.

Llega el momento de analizar en frío... ¿Cuál es el problema? El equipo juega bien un tiempo, y en el otro se cae. ¿La causa? Con Piola Musgo y el Pancu fue en el segundo tiempo, lo que podía ser algo físico. Hoy fue el primer tiempo, entonces el factor no viene por ese lado. Si seguimos buscando, encontramos el punto: la mentalidad. Los bajones vienen con los goles rivales. Surge impotencia, depresión, furia, bronca, y el equipo se sale del partido, apurado por hacer algo. Ahí viene el aluvión de goles del rival, agrandado y confiado, que juega a "gusto y piacere". Hay que mejorar ese aspecto, no sufrir tras el gol rival, mantener el nivel y si es posible mejorarlo. Porque cuando el equipo se motiva, es imparable. Ese segundo tiempo (5-3 para el Violeta) y los primeros tiempos frente a Piola Musgo y Pancu lo prueban: mucha actitud, huevos y cada vez mas futbol y mas goles. Meterle miedo al rival, gritando cada gol como si fuera el último y dejando la vida en cada pelota. Como se viene repitiendo en todos los artículos, el equipo puede remontar esta situación y comenzar a ganar, solo depende de sí mismo, en su fortaleza mental. Esa que está dormida, pero que cuando despierta, asusta a todos.

La próxima fecha es frente al AVAI, a las 12.45, por la 8va fecha del Torneo.