Venía motivado el Violeta. Llevaba mas de 7 partidos invicto y con los últimos 6 partidos ganados con mucha autoridad y un estilo que pensaban podia llevarlos bien alto. Pero hoy por la mañana chocaron duramente contra la realidad, con una derrota por 10-2 frente al OADyR que podría haber sido catastrófica. Este team, puntero de la división D1, venía de vencer 10-0 en el partido pasado. Pitta, en su debut, salió apuradísimo, a querer pasar por encima al rival, jugando ciego y errático. El pelotazo fue moneda común en un equipo que no supo pararse dentro de la cancha, que se desordenó tras 5 primeros minutos sorprendentes. La delantera, conformada por Camblor y Gonzalo Ferrentino (muchas ganas y poco éxito) tuvo dos de entrada que salieron por poco, y ni el 1-0 rival hizo mella en el equipo, que en la siguiente jugada aprovechó una contra de la mano de Camblor quien con lo justo pudo empujarla y marcar el empate. Pero el equipo siguió apurado, perdido, separado, y dos errores seguidos pusieron el marcador 1-3. El Violeta no llegaba por ningún medio, pero nuevamente Camblor aprovecho una contra y puso el 2-3 con una forzada definición tras un remate suyo en el palo. Parecía que volvía al partido, pero los errores se multiplicaron, se pagó cara la falta de experiencia y 5 minutos después la pizarra marcaba 2-5. Pittaluga no ofrecía oposición a los ataques rivales, estaba conmovido. Y en el siguiente ataque llegó el Knockout: El Chino quedo en el camino y la definición del delantero rival que tenía destino de gol fue evitada con la mano en una acción infantil por Camblor, que venía derecho, el cual recibió Tarjeta Azul y fue reemplazado por Ángel Álvarez. Juntando la expulsión de Camblor (podrá jugar el próximo domingo debido a que fue solamente tarjeta azul) y la ausencia por motivos personales de Otero, líder de la defensa, Pitta se vio en el horno. Con mucha actitud (el Chino Paradela contuvo el penal provocado por Camblor), siguió luchando y se fue con ese marcador a los vestuarios. En el 2do tiempo siguieron los frecuentes errores en la salida, y ya todo se limitó a un monólogo del equipo rival. Pitta, de la mano de Germán Ferrentino, quien anduvo apagado, trataba de crear peligro, pero no era acompañado, se perdía en la gambeta. Finalmente fue 10-2, gracias a las salvadas de último momento del Chino, de Aleidín y de Acebey. Con la cabeza baja y el ánimo por el piso se retiró el equipo del Club del Pasaje tras la dura derrota, la cual sirve para aprender. Y mucho.
Se pagó cara la falta de experiencia, ante un equipo que conoce mucho de esto. Faltó la concentración necesaria y el apuro le nubló la vista y la cabeza a los jugadores. Las salidas eran un peligro, la pelota no cruzaba la mitad de la cancha y los delanteros volvían poco a colaborar. Falta el rodaje que te da la competencia, esa mezcla de tranquilidad y viveza que se van adquiriendo partido tras partido. Faltan esas lecciones como las de hoy, para demostrar que para ganar hace falta mas que correr. Fue el debut simplemente, no se puede pedir demasiado en un debut. La voluntad es lo que sobra. Hay equipo como para hacer las cosas mejor, lo que hace falta es saber aprovecharlo, ubicarlo en la cancha y mejorar la parte futbolística. Si el grupo se compromete puede llegar lejos. Ese nivel que se ve en los amistosos, esa soltura al jugar, esa velocidad de toque, todo eso debe ponerse en práctica en los partidos por los puntos. Para eso se necesita rodaje y mucha concentración. Donde hay ganas y material se pueden hacer grandes cosas. Y en el Club Sportivo Pittaluga sobran las dos. Por eso no hay que bajar los brazos ni darse por muertos, hay que mirar para adelante, que todavía quedan 8 partidos, 8 revanchas de este duro traspié, que es solo eso, un tropiezo.
